Washington, 22 ago (EFE).- La súbita devaluación del yuan por parte de China no solo ha provocado inquietud en los mercados bursátiles y las economías emergentes exportadoras de materias primas, también ha elevado la presión sobre la Reserva Federal (Fed) de EE.UU, en un momento en el que se dispone a elevar los tipos de interés y contribuir así a la apreciación del dólar.